Cuando KIA presentó al Stinger dió un gran golpe en la mesa con el cual mostraban que ya no sólo una marca de coches accesibles que conocíamos en los 90. Su progreso había sido tal que ahora podían fabricar un auto capaz de medirse con otros de marcas premium europeas. Poco a poco ha probado sus capacidades, sin embargo, aún hay cosas que no terminan de convencer a los clientes y ello pone en riesgo su continuidad.
En entrevista para Car Advice, Gregory Guillaume, parte del equipo de diseño a cargo del Stinger, confirmó que la marca está en duda sobre darle una nueva generación al Stinger o simplemente dejarlo para enfocarse en otros proyectos.
Las causas principales son que en algunos mercados no han alcanzado el nivel de ventas esperado. A pesar de ello, admiten que dentro de la marca se tenía proyectado eso, producir pocas unidades —en comparación con las de sus otros modelos—, ya que sus ventas no serían tan altas. Sin embargo, los clientes aún dudan al considerar pagar el precio de un premium en un KIA.
Guillaume, explica también que esto último es un fenómeno común, pues cuando empezó su carrera en Audi, al A8 le tomó tres generación ser reconocido como un auto al nivel del BMW Serie 7 y Mercedes Clase S. Por lo que KIA deberá tener mucha paciencia si es que planean continuar con el Stinger. Por ahora no hay nada oficial, pero queda la opción de que si se produce una segunda generación del Stinger, pueda estar electrificada en el algún nivel para hacerlo más atractivo y adaptable al futuro de la industria.
