De los primeros radios a la pantalla táctil: así ha evolucionado el entretenimiento en el auto
Es martes por la mañana, te diriges a bordo de tu auto rumbo a la escuela o trabajo. Para ti es completamente normal poner el dedo sobre la pantalla táctil y cambiar de estación, de canción, recibir una llamada o poner tu playlist favorita de Spotify. Pero aunque no lo creas, no siempre fue así.
No importa que seas millenial o baby boomer, en algún momento de tu vida viviste la evolución de ese compañero que va contigo a las vacaciones, al trabajo, al gym o a casa. Se llama radio y es un accesorio que ha evolucionado a través de más 80 años.
Es difícil saber con exactitud el origen de la radio para automóviles, debido a que son varios los genios que se adjudican su paternidad. Muchas personas piensan que la radio para auto nació en Estados Unidos, sin embargo, se tiene datos que alrededor del año 1897 en Chelmsford, Inglaterra, se llevaron a cabo los primeros experimentos con radios “sobre ruedas”.
Ford T, el primero en incorporar una radio a bordo
Los libros de historia afirman que en 1922, George Frost desarrolló un prototipo de radiorreceptor compacto que constaba de dos botones gracias a los cuales podía ser controlado.
Se sabe que Frost colocó ese curioso adminículo en un Ford Modelo T, de tal forma que podemos considerar que este legendario auto fue el primero en incorporar un radio.
Unos años después, en 1927, Philadelphia Firma Storage Battery Co. Sacó a la venta radios que eran compactas, pero sumamente pesadas (aproximadamente 20 kilos), pero que a final de cuentas podían ser instalados en los autos.
Sin embargo, no fue sino hasta 1930 que llegó al mercado Motorola 5T71, un radio receptor que tuvo regular éxito, pese a que costaba alrededor de 130 dólares, lo mismo que valía un coche por aquellos ayeres.
Por ese mismo tiempo, Blaupunkt llegó a un acuerdo con Studebaker para ofrecer un radio como equipo de serie en los modelos de mayor lujo de la marca norteamericana. Por supuesto que estamos hablando de radios muy básicos, compuestos por tubos de vacío y transformadores grandes y pesados.
Con la llegada de la Segunda Guerra Mundial y la necesidad de tener comunicaciones en todos los frentes, los coches se beneficiaron con la introducción de radios más compactos y eficientes, aunque todos ellos sólo contaban con frecuencia de Amplitud Modulada (AM).
En 1953 se lanzó el modelo Becker AM / FM, equipado con botón de búsqueda de estación totalmente automática.
No fue sino hasta 1952 cuando Blaupunkt comenzó a ofrecer receptores FM. El modelo FM-900 de Motorola fue el primero en comercializarse en masa, allá por 1959. Con la llegada de la década de los 60, la radio para los coches evolucionó hacia los transistores.
La revolución del casete
En los albores de la década de los 60, concretamente en 1963, tres empresas (Ford, Motorola y Delco Remy) presentaron las primeras radios capaces de recibir AM/FM. Tres años después, Philips presentó el primer componente que además de radio, contaba con reproductor de casetes.
Ya durante la década de los 70, las radios para coche continuaron evolucionando, pudiendo reproducir casetes extraíbles. En los 80, fueron marcas como Panasonic, Kenwood, Sony y muchas más que lanzaron unidades principales que también reproducían CD.
No debemos olvidar que durante esta década llegaron las cajas de CD que se instalaban en la cajuela del auto y que permitían la reproducción de hasta 12 discos compactos ¡toda una revolución!
La misma década de los 80 y los albores de los 90 fueron testigos de la llegada de los autoestéreos extraíbles, primero, y luego de las unidades principales con carátulas desmontables, planeadas así para desalentar a los amigos de lo ajeno.
Con la llegada del nuevo milenio arribó el formato MP3 y con él, los autoestéreos capaces de reproducir discos compactos con música comprimida. Ya para ese entonces, las unidades principales eran capaces de sintonizar automáticamente las emisoras.
Fue durante los albores de esta década que a la revolución tecnológica se sumaron empresas como Sirius que comenzaron a ofrecer radio vía satélite a bordo. Importante es subrayar que esta tecnología se mantiene vigente, pese al embate de la música en streaming.
Con la llegada de las unidades principales con pantalla retráctil, la tecnología inició un nuevo proceso de actualización que nos lleva hasta la época actual, donde la gran mayoría de los autos ya incluyen pantallas táctiles, desde donde prácticamente se puede controlar todo el sistema de infoentretenimiento.
Pero las cosas no se detienen ahí. La tecnología sigue adelante y lo que sigue aún está por descubrirse. Aunque algunos de los vehículos de la actualidad como el BMW Serie 5 y el X3 y el Volkswagen Golf que se vende en Europa ya cuentan con unidades principales que se controlan con gestos, falta que esa tecnología se popularice y llegue a más vehículos.
Sin olvidar, claro, lo que la tecnología nos tenga reservados.
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