
Probablemente, alguna o varias veces has ido a un autolavado a presión, para sacar toda la suciedad de tu coche y has observado que el operador recurre a una pistola de agua a presión para desincrustar toda la porquería acumulada de la carrocería y los vidrios, pero en Rusia, llevaron este concepto a otro nivel.
Resulta que a los ingenieros militares del ejército ruso les pareció buena idea dar una segunda vida a los motores a reacción de los cazas soviéticos que se retiraban del servicio, así que los metieron en camiones, para dar forma a una especie de Karcher ultra potente.
En Rusia suelen tener ideas diferentes, por eso hacen tantas cosas a lo grande. Un ejemplo es el TMS-65U, un camión militar que lleva un motor a reacción de avión de combate en la parte trasera y que tiene múltiples propósitos, aunque podríamos definirlo como máquina de descontaminación.
La clave de este vehículo es el motor a reacción VK-1, que monta en la parte trasera. Se trata de un turborreactor que comenzó a fabricarse en 1947 y que se utilizó durante décadas en el caza MiG-17 y en el bombardero Il-28. Cuando Rusia retiró del servicio a estos aviones soviéticos, decidió dar una segunda vida a ese motor a reacción.
En su momento, el ejército ruso pensó que podría servir para labores de descontaminación, pero a lo grande, así que lo metió en la parte trasera de uno de sus camiones militares más salvajes, el Ural 375 6x6, un modelo extremadamente duro, que puede circular prácticamente por cualquier terreno y que tiene una gran capacidad de carga.
Para ello, Rusia diseñó una base giratoria para instalar el motor en el chasis del camión y también equipó al Ural con un depósito de combustible de 900 litros, para alimentar el motor, que en este caso no serviría para propulsar el vehículo, sino para disparar a presión fluidos de descontaminación, como si fuera una Karcher ultra potente. El conductor lleva el camión y un segundo operador se encarga de manejar el motor a reacción.
Hay otra variante denominada TM-65M y utiliza como base el camión Ural-4320, también 6x6, pero con una mayor capacidad de remolque. De hecho, en lugar de incorporar en el chasis el depósito que alimenta el motor a reacción, remolca un tanque.
Este aparato de descontaminación masiva lleva varios años en funcionamiento. Principalmente, sirve para limpiar vehículos militares, como tanques y otros camiones, incluso si han sido contaminados con agentes químicos. También hay un TMS-65U a bordo del portaaviones Almirante Kuznetsov y se utiliza para limpiar la cubierta.
Además, el TMS-65U sirve para levantar grandes columnas de humo en el campo de batalla, esto con el objetivo de limitar la visibilidad del enemigo. También puede descontaminar grandes áreas de terreno en caso de que hayan sido rociadas con agentes químicos.
Otro de los usos de este aparato es como máquina quitanieves. Utilizando su capacidad de disparar líquido a presión, se despejan rápidamente las carreteras, vías del tren, pistas de los aeropuertos e incluso los aviones.