En Asia ya tienen otro truco para ofrecer autos eléctricos baratos: vendértelos sin la batería y cobrarla por separado

Una de las partes más caras de un automóvil eléctrico es la batería, pues su costo de producción es muy elevado, lo que a su vez se refleja en el costo del vehículo, sin embargo, una nueva marca asiática ideó una manera de ofrecer automóviles a precio bajo para garantizar ser competitivos en el mercado. 

Esta marca se llama Perodua y es un fabricante de Malasia, y acaban de presentar su primer vehículo desarrollado internamente: el Perodua QV-E (Quest for Visionary Electric Vehicle). Se trata de un SUV subcompacto, de accionamiento 100% eléctrico y es el primer vehículo de este tipo que se diseña enteramente en Malasia. 

La plataforma del Perodua QV-E se desarrolló en colaboración con Magna Steyr (fabricante que colaborado en el desarrollo de modelos de BMW, Mercedes-Benz, Audi e incluso Aston Martin) y se dice que podría soportar trenes motrices híbridos o eléctricos de rango extendido. 

Sus dimensiones están pensadas para un entorno urbano, pues a lo largo mide 4,170 mm, el ancho es de 1,800 mm, la altura llega a 1,502 mm y la distancia entre ejes es de 2,680 mm. A decir verdad, el diseño no es nada feo, y luce faros LED, manijas ocultas y una carrocería tipo coupé. 

El Perodua QV-E cuenta con un solo motor eléctrico, que genera 150 kW (201 hp) y 210 lb-pie hacia el eje delantero, ofreciendo una aceleración de 0 a 100 km/h en 7.5 segundos. Este motor recibe energía por parte de una batería de 52.5 kWh fabricada por CATL, y más allá de ser el corazón de este eléctrico, también es el punto principal de la noticia. 

Mencionamos lo anterior, no por la autonomía de 370 km bajo el ciclo WLTP, sino por el hecho de que Perodua puede vender este automóvil sin la mencionada batería, o dicho de una mejor manera, la cobra aparte. 

Posiblemente muchos se preguntarán que cómo es posible que un auto eléctrico no incluya en el precio un elemento fundamental para el funcionamiento del vehículo, y esto es porque la marca malaya decidió ofrecer este automóvil a un precio de 80,000 Ringgit, que son poco más de $350,000 pesos mexicanos. 

Al mantener un costo bajo podría atraer a más compradores potenciales, sin embargo, el truco está en el costo de la batería, que se ofrece aparte, bajo un esquema de arrendamiento por 9 años, con un costo mensual de 297 Ringgit, algo así como $1,315 pesos.

Si sacamos la cuenta, por el plazo de 9 años el comprador pagaría el equivalente a cerca de $142 mil pesos mexicanos. Posiblemente para muchos no tiene sentido que la marca no cobre un elemento esencial en el costo final del auto, pero hay dos factores positivos de este esquema: el cliente tiene que hacer un desembolso menor (aunque en Malasia hay otras opciones más accesibles) y además Perodua asegura que durante todo el periodo de arrendamiento reemplazará cualquier batería que se degrade a menos del 70% de la capacidad original. 

A cambio del precio de venta, el comprador recibirá rines de 18 pulgadas, pantalla táctil de 10.25”, cuadro de instrumentos digital, cámara 360, asiento del conductor con ajuste eléctrico, y ADAS- ¿Ustedes qué opinan de este esquema, les parece una buena idea o no le encuentran el sentido?