El lanzamiento de la nueva generación del XC90 hace un par de años marcó un antes y un después en la historia de Volvo. Sentó las bases de diseño que regirían a los modelos de la firma sueca los años siguientes, estrenó tecnología de conducción semiautónoma y, en general, fue una piedra angular para el renacimiento de la firma sueca.
Su éxito no se hizo esperar. Estados Unidos se convirtió en su mercado más importante, por lo que en Volvo ya piensan cómo volver (aún) más rentable el proyecto de la siguiente generación del XC90. La solución llega de la mano de su nueva fábrica ubicada en Carolina del Sur, donde comenzará a producirse a partir de 2021.
En la actualidad, el XC90 es exportado a todo el mundo desde Suecia. La idea de fabricarlo en Estados Unidos es abastecer el mercado local con una producción de 150,000 unidades al año. En dicha fábrica también se producirá la siguiente generación del S60, cuyo lanzamiento está previsto para el segundo semestre de 2018. El modelo actual es fabricado en Bélgica.
Con esta acción, Volvo realiza una inversión de 1,100 millones de dólares en su fábrica de Estados Unidos, con lo que también generará 1,900 empleos a la fábrica para sumar un total de cerca de 4,000 empleados. La fábrica de Carolina del Sur fue anunciada en mayo de 2015. Volvo eligió este estado por su facilidad de acceso a puertos internacionales y a infraestructura, así como por la mano de obra bien entrenada, el ambiente de inversión atractivo y la experiencia en la fabricación de autos. Es preciso recordar que BMW también cuenta con instalaciones en Carolina del Sur.
