Toyota no es indiferente a la mina de oro que representa hoy el mercado de los SUV. Para complementar la oferta del C-HR, la firma japonesa ya se encuentra trabajando en un modelo más pequeño, con talla cercana a cuatro metros, y basado en la nueva generación del Yaris.
El C-HR de algún modo participa en el mismo segmento de los B-SUV, pero su precio y oferta de motores tiene más en común con Corolla y Prius que con Yaris. Lanzar un nuevo SUV basado totalmente en un subcompacto le permitirá a Toyota ofrecer un modelo más accesible, capaz de plantar cara con mayor facilidad a algunos superventas europeos, como Arona y Captur.
El nuevo SUV de Toyota recurrirá a la plataforma TNGA-B y será apenas más largo que el nuevo Yaris, con el que también compartirá fábrica en Francia y varios elementos de diseño. Se espera un sistema de propulsión híbrido con motor de 1.5 litros, con potencia cercana a 115 hp y transmisión CVT, aunque no se descartan bloques de 1.0 y 1.5 litros —sin electrificación— para otros mercados.
Su lanzamiento está previsto para finales de este año. No sabemos si tendrá un enfoque local o global. En principio estará destinado para Europa, sin embargo, por el enfoque global en el que Toyota enfatizó al presentar la plataforma TNGA-B, es probable que también se produzca en otras instalaciones de la marca.
No se descarta su lanzamiento en Latinoamérica, sin embargo, hay que tener en cuenta que para algunos países de nuestra región, Toyota prepara el lanzamiento del Raize, un SUV de talla similar, creado a partir de una plataforma de Daihatsu.
