En las últimas semanas han circulado en todo el mundo las protestas que algunos jóvenes en representación de una organización en contra del cambio climático han llevado a cabo principalmente en museos, lanzando sopa de tomate o pintura en obras como Los Girasoles de Vincent Van Gogh.
Dicha organización que lleva por nombre Just Stop Oil y lucha porque ya no se produzca más gas y petróleo en Reini Unido, volvió a aparecer, pero esta vez llamando la atención de una manera diferente, pues ahora arrojaron pintura en varios concesionarios de autos de súper lujo ubicados en la capital de Inglaterra.
La protagonista de este acto fue Emma Brown de origen escoces y 31 años que fue detenida por la policía británica por rociarle pintura a las fachadas de los distribuidores de Bentley, Bugatti y Ferrari.
Según la información, los jóvenes que han realizado las protestas al parecer están siendo financiados por una millonaria estadounidense y desde que iniciaron las acciones el pasado mes de febrero, la policía británica ha detenido a 585 involucrados según datos que proporcionó la misma organización.
El objetivo de este acto fue claro desde el principio, llamar la atención de todos para que, en el momento preciso, es decir, previo al arresto de Emma, otros integrantes de Just Stop Oil alzaran la voz declarando su postura.
Cabe señalar que también en el Salón del Automóvil de París sucedió algo similar, aunque bajo otros representantes denominados Extinction Rébellion, quienes protestaron contra el cambio climático, la industria automotriz y el “coche individual” tirando pintura en algunos vehículos Ferrari como un Montial T, un 360 Modena y un F430.
