Nissan Santana, o el día que los japoneses fabricaron y vendieron coches alemanes
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Nissan Santana, o el día que los japoneses fabricaron y vendieron coches alemanes

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Es probable que el nombre Santana no te suene conocido en un coche, mucho menos con el apellido de Nissan, pero seguro que recuerdas al emblemático Volkswagen Corsar de los años 80. Pues bien, aunque no lo creas, se trata del mismo auto, el abuelo del Passat fabricado y vendido por los japoneses.

No es novedad que algunas marcas firman alianzas específicas, y a pesar de que Nissan y Volkswagen nunca han sido de trabajar muy juntas, en Japón sucedió. En la década de los 80, importar autos de Volkswagen desde Alemania era carísimo y eso se reflejaba en el precio de sus modelos. Ante tal situación, Takashi Ishihara, el entonces Presidente de Nissan, vio una oportunidad de negocio: fabricar el Santana y venderlo como Nissan.

Importar Volkswagen desde Alemania era muy caro. Nissan decidió producir y vender localmente el Santana.
Nissan Santana

El Nissan Santana entró a producción en febrero de 1984 en la fábrica de Kanagawa. Las modificaciones respecto al modelo original de Volkswagen eran mínimas: volante del lado derecho, modificaciones menores en parrilla y faros y una carrocería 5 mm más estrecha para evitar pagar un impuesto japonés sobre autos que superaran los 1,690 mm de ancho.

El Nissan Santana era 5 mm más estrecho que su equivalente en Volkswagen, para evitar un impuesto en Japón.

Nissan adoptó al Santana como si fuera su hijo, incluso tenía su propio código interno de producción (M30), pero los autos mantuvieron los emblemas de Volkswagen por doquier. La mecánica también era alemana; estuvo disponible con motores de gasolina de 1.8 litros de 100 hp y de 2.0 litros de 110 hp, a petición del cliente podían llevar transmisión automática de tres velocidades. También estaba disponible un turbodiésel de 72 hp.

Nissan Santana 7

Según parece, Nissan quería dejar claro que el Santana era un producto de Volkswagen. Algunas ediciones disponibles llevaban nombres como Meisterwerk o Autobahn, e incluso los anuncios de televisión conservaban los textos en alemán. Sin embargo, pese a todos los esfuerzos de Nissan y que el precio del auto era notablemente inferior al de otros Volkswagen importados, las ventas no fueron tan elevadas como se esperaba.

Nissan tenía previsto vender entre 48,000 y 60,000 unidades anuales del Santana, pero tras 7 años sólo consiguió vender 50,000 autos.

Nissan tenía previsto vender entre 48,000 y 60,000 unidades del Santana al año, pero al cabo de los 7 años que estuvo en producción, sólo consiguió vender alrededor de 50,000 autos. Por tal razón dejó de fabricarlo en octubre de 1989 y siguió vendiéndolo hasta terminar con el stock en mayo de 1990. A partir de entonces, y por sólo unos meses, Nissan vendió la nueva generación del Passat a través de su red de concesionarios, pero esta vez fabricados por Volkswagen. La relación terminó en 1991, cuando la firma de Wolfsburg firmó un acuerdo de colaboración con Toyota.

Nissan Santana 2

El Volkswagen Santana fue todo un éxito en China

Por alguna razón, el mercado más exitoso del Santana fue China. Comenzó a fabricarse localmente en octubre de 1984 y apenas 11 meses después, la unidad número 10,000 ya estaba saliendo de la línea de producción. Su uso se volvió extremadamente popular entre particulares, taxis y flotillas de patrullas.

Fue, por así decirlo, el equivalente al Tsuru en México. Su producción continuó hasta el año 2013, manteniendo la misma plataforma y únicamente recibiendo actualizaciones estéticas; una en 1991 y otra en 2004. A lo largo de su trayectoria utilizó motores de 1.6 litros de 86 hp, de 1.8 litros de entre 94 y 99 hp, así como un 2.0 litros de 107 hp. En años más recientes —2011— estuvo disponible con un motor de 1.6 litros de 94 hp.

La segunda generación se presentó hasta 2013 y aprovecha la plataforma del SEAT Toledo. Se trata de una renovación total. Está disponible con motor de 1.4 litros de 90 hp o un 1.6 litros de 110 hp.

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