Seleccionar un destino, pedir un viaje, llevar un caso puesto en todo momento. Los pasos para viajar en Uber Moto son sencillos, pero para algunos prestadores del servicio, un requisito adicional debería añadirse antes de querer viajar en este medio de transporte: no tener sobrepeso.
Una publicación en el grupo de Facebook “Uber CDMX” desató polémica luego de que un conductor de Uber Moto hiciera comentarios sobre los pasajeros con sobrepeso y sin experiencia en motocicletas.
“Si están gordos y no saben mantener el equilibrio o viven en el Estado de México, porfa no pidan moto”, escribió el usuario Cristian Castro. Su comentario incluyó una captura de pantalla del feedback enviado a la empresa donde argumenta que estos factores le han conllevado quejas de varios pasajeros.
“Lo piden personas que no se han subido a motocicletas o que tienen sobrepeso y eso afecta la conducción y la experiencia en el viaje”.
Aunque Uber exige el uso de casco y medidas de seguridad, no especifica límites de peso o solicita experiencia para los pasajeros. Estos límites vendrían, en todo caso, desde el lado de los vehículos: las motocicletas Italika, populares en México, tienen una capacidad de carga que rara vez supera los 150 kg, y lo mismo puede decirse de modelos de Honda o Yamaha.
“Cuando existe un excedente de peso se obliga a que componentes como ejes, rodamientos, cadena y sprockets trabajen de más, lo que aumenta su desgaste prematuro”, se lee en el blog de Italika.
Un servicio en una gris zona legal, incluso sin hablar de peso máximo
Uber Moto, un servicio disponible en varias ciudades mexicanas, permite a los usuarios solicitar viajes en motocicleta como una alternativa más ágil y económica al transporte tradicional. Entre sus ventajas, la marca destaca la rapidez en el tráfico, menor costo y la comodidad frente a unidades de transporte público saturadas. No obstante, el servicio también ha enfrentado críticas y denuncias por operar en zonas donde no cuenta con permisos oficiales.
En Puebla, por ejemplo, el gobierno estatal presentó en febrero de este año una denuncia contra Uber por ofrecer traslados en moto sin autorización. La titular de la Secretaría de Movilidad, Silvia Tanús, aseguró que las motocicletas no cumplen con los requisitos legales ni de seguridad, como frenos ABS o cinturones, por lo que pidió a los ciudadanos no usar este servicio, al considerarlo un riesgo para su integridad física.
Además, el marco legal en gran parte de América Latina no reconoce a los mototaxis como transporte público formal. Según Rest of World, Uber Moto y otras plataformas operan en una zona gris legal, lo que deja a los usuarios sin garantías claras en caso de accidente.
El comentario de Castro, por otro lado, revivió un debate sobre inclusión y discriminación en plataformas de transporte. Basta con recordar lo ocurrido a inicios de este año en Estados Unidos, cuando la rapera Dank Demoss demandó a Lyft luego de que un conductor le negara el servicio por su tamaño, y eso que no se trató de una una moto, sino de un automóvil.
Imágenes: Uber
