En el mundo automotriz, parpadeas y ya ocurrieron tres innovaciones. Sobre todo si vienen desde China. La industria de ese país acaba de dar uno de esos pasos que podrían redefinir la movilidad eléctrica: Changan y CATL, el mayor fabricante mundial de baterías para autos eléctricos, lanzaron un sistema que permite cambiar una batería descargada por una completamente cargada en apenas 100 segundos.
Los autos eléctricos tienen una batería fija que se recarga en estaciones especiales o en la casa del propietario, si tiene la infraestructura necesaria. Pero la novedad con el nuevo Oshan 520 de Changan es que tiene batería intercambiable, que cuando está por descargarse simplemente se reemplaza por otra recién cargada. Tal y como ir a la gasolinera, y más o menos en el mismo tiempo que toma llenar el tanque de combustible.
Este avance hace sentido cuando vemos que los primeros 1,000 sedanes eléctricos Oshan 520 con baterías intercambiables van a ser usados como taxis, autos que no pueden darse el lujo de esperar durante todas las horas que toma recargar la batería de un EV tradicional. Este modelo cuenta con una batería de 56 kWh y ofrece una autonomía de hasta 515 km, todo por un precio de salida de 166,890 yuanes (unos 23,100 dólares).
El experimento ya está operando en la ciudad china de Chongqing, donde CATL instaló 34 estaciones de intercambio de baterías Choco-SEB, y planea alcanzar las 1,000 estaciones en 31 ciudades para finales de 2025, según anunció la empresa en diciembre pasado. Cada estación puede realizar hasta 822 cambios de batería diarios, lo que representa una capacidad muy superior al de las estaciones de carga rápida actuales.
Estaciones de intercambio de baterías
La solución Choco-SEB, desarrollada por CATL, permite cambiar el bloque de energía completo para cargarlo externamente. Basta con llegar a una estación, retirar la batería descargada y colocar una nueva, todo en menos de dos minutos.
Marcas como GAC, SAIC, Nio y Wuling también se sumaron al proyecto, lo que anticipa una rápida adopción del sistema. Modelos como el GAC Aion S, el Hongqi E-QM5 y el Wuling Bingo ya están confirmados para integrarlo en sus próximas versiones.
Según CATL, cada batería intercambiable ofrece una densidad energética de 160 Wh/kg y es compatible con múltiples plataformas de vehículos eléctricos, gracias a la tecnología CTP (cell-to-pack). ¿El inconveniente? Es un modelo de suscripción, aunque al menos cuesta solo 0.1 yuan por kilómetro recorrido (unos 27 centavos de pesos mexicanos).
Mientras fabricantes como Tesla siguen apostando por la carga rápida, China parece rebasar por la izquierda con esta estrategia para el futuro de la movilidad eléctrica sin cables ni esperas, sino estaciones de intercambio de baterías. Para quienes han dudado en adoptar un EV por las largas recargas, esta innovación podría ser el cambio que estaban esperando.
Imágenes: Changan
