¡Lo sentimos mucho, señores taxistas! En un ambiente cada vez más peligroso y vulnerado por la delincuencia, los servicios de transporte por aplicación se han convertido en una utilidad necesaria para una movilidad eficiente y rápida a través de la ciudad, ganando mercado a los taxis tradicionales quienes se han visto seriamente afectados y han organizado diversas movilizaciones para intentar sacar del mercado a estas empresas.
Sin embargo, la percepción de los clientes es un excelente indicador de qué tanta confianza y seguridad brindan estos dos servicios y los números reflejados en el Estudio sobre percepción de seguridad en movilidad para la Ciudad de México, organizado por el Grupo de Economistas Asociados (GEA) e Investigaciones Sociales Aplicadas (ISA) son bastante claros al respecto.
En dicho estudio se encuestó vía telefónica a más de 1,700 personas mayores de edad que residen en la Ciudad de México y que fueran usuarios de ambos tipos de servicios para poder realizar una comparación equilibrada y justa. Los números fueron bastante claros y es que el 91% de los encuestados refirió sentirse más seguro al utilizar transporte de apps.
Este mismo estudio refiere que al utilizar taxis tradicionales, las personas suelen sentir bastante miedo de parar un taxi que pudiera resultar un vehículo irregular o “pirata” en la calle, además de que no consideran que estos cuenten con suficiente seguridad.
De igual forma, el 73% de los usuarios dijeron sentirse protegidos por los sistemas incorporados en las aplicaciones de movilidad, tales como los botones de pánico, la opción de compartir viaje con nuestros contactos, el centro de atención telefónica y las opciones para conocer la información del conductor.
En contraste a estos números, tan solo 7 de cada 100 personas encuestadas (7%) dijeron sentirse seguros al abordar un taxi tradicional, números que se muestran sumamente inferiores a la confianza que brindan las apps de movilidad.
En el tema de la calidad en el servicio, también encontramos una disparidad enorme y es que mientras el 78% de los encuestados que utilizan un transporte de aplicaciones dijeron sentirse conformes con el servicio y las unidades brindadas por estas empresas, tan solo el 6% dijo preferir el servicio de los taxis tradicionales.
De estos encuestados, el 94 refirió que el servicio de aplicación es mejor debido a que los vehículos se encuentran limpios, en buen estado y son coches de modelo reciente, mientras que solo el 41% de los usuarios de taxis tradicionales consideró que las unidades están en buenas condiciones, números que quedan reflejados tan solo al dar un vistazo a los taxis que podemos ver en las calles.
El tema del precio fue algo más a destacar y es que el 86% de los usuarios de plataformas digitales consideró que el precio que se les cobra es justo mientras que el 57% considera que el taxi tradicional tiene tarifas justas, algo que podría parecer extraño en primera instancia.
La explicación de este fenómeno es algo más simple de lo que parece y es que el 88% de las personas encuestadas dijo sentir que su tarifa está mejor cobrada debido a que las apps se guían por el GPS para ofrecer la ruta más corta y eficiente hacia el destino y el 67% dijeron sentir que los taxis tradicionales usan rutas largas para hacer cobros más elevados a los usuarios.
Como podemos ver, el uso de las apps ha ganado una gran cantidad de terreno frente a los taxis tradicionales y es que en muchos sentidos ofrecen un servicio de mayor calidad al de un taxi tradicional y en distancias largas sus tarifas pueden ser incluso mejores, lo que determina que poco a poco más y más personas se unan al uso extendido de estos servicios.
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