Los autos modernos han adoptado las llamadas llaves de presencia o llaves inteligentes, que permiten abrir y encender el vehículo sin sacar la llave del bolsillo. Esta tecnología, presente en prácticamente todas las marcas, funciona mediante un transmisor con identificación única que envía señales al vehículo para desbloquear puertas o activar el encendido. Pero, ¿qué hacemos si se agota la pila?
Presionar un botón para encender un auto con llave de presencia sugiere que todo es inalámbrico, pero la mayoría de estas llaves incluye una llave física oculta. Esta puede desplegarse al presionar un pequeño botón en el llavero, permitiendo abrir manualmente la puerta del auto. En muchos modelos la cerradura está escondida bajo una pequeña cubierta plástica en la manija, la cual puede retirarse con una ligera palanca.
Ya dentro del vehículo, el siguiente reto es encenderlo. Si el sistema no detecta señal por falta de batería en la llave, el truco consiste en acercar el llavero directamente al botón de encendido, como recuerdan desde Siempre Auto. Según Kia, se debe pisar el freno y presionar el botón de arranque con la propia llave, asegurando que esté en ángulo recto. El auto reconocerá el chip interno y arrancará como de costumbre. En otras marcas de autos, la llave física escondida dentro de la llave de presencia se usa para encender el coche de forma normal, pero hay que encontrar el switch donde se introduce.
Este procedimiento puede variar ligeramente según la marca y el modelo, por lo que lo mejor es consultar el manual de usuario del auto. Para prevenir esta situación, varias marcas de coche emiten un aviso en el tablero cuando la batería está baja. Ignorar esta advertencia puede dejarte varado.
Podría parecer que la tecnología ha reemplazado por completo a la llave tradicional, pero aún existen mecanismos de respaldo que permiten abrir y encender el auto cuando la pila falla. La clave está en conocer dónde se esconde la cerradura, cómo extraer la llave física y qué hacer una vez dentro.
La próxima vez que notes que tu llave ya no responde, no entres en pánico. En lugar de llamar a la grúa o al cerrajero, recuerda este sencillo truco que podría sacarte del apuro. Después, claro, cambia la batería lo antes posible.
