Pablo Monroy
No cabe duda de que el Bugatti Mistral es una obra de arte sobre ruedas de cinco millones de dólares y cuya producción se limitó a 99 unidades. No es sólo convertible más rápido de producción del mundo, pues llegó a alcanzar una velocidad máxima de 453.91 km/h en circuito, sino una creación de la ingeniería que pocos se pueden permitir.
Anthony Hsieh es uno de ellos y recientemente recibió su Mistral directamente del CEO de Bugatti-Rimac, Mate Rimac. Y no solo eso, pues consiguieron que la policía detuviera el tráfico para que pudieran ponerlo a prueba a sus anchas.
Hsieh es el multimillonario que recibió su Bugatti Mistral y su barco pesquero personalizado de 15 metros el mismo día, según Luxurylaunches. El hombre, de 60 años y propietario de Bad Company Fishing Adventures, recibió no sólo una bestialialidad de cuatro ruedas de 1,600 hp, sino también un barco,junto con la experiencia más loca que hemos visto e mucho tiempo.
Decimos esto porque Rimac fue en persona a entregarle el juguete y, de paso, convencieron a la policía californiana de que cortaran un tramo de carretera pública para que pudieran hacer una carrera. ¿Contra quién? Pues contra el otro juguete de Hsieh: un barco pesquero personalizado que alcanza los 44 nudos de velocidad.
"La policía está cerrando esta carretera para que podamos divertirnos en este coche. Sólo un día normal", comentó Rimac en su Instagram. Lo que se lleva Hsieh a cambio de los cinco millones de euros es la última posibilidad de disfrutar del motor W16 y el último miembro de una saga histórica de convertibles, en la que destacan joyas como el rápido Bugatti Type 35 o el rarísimo Type 57 Roadster Grand Raid.
El diseño exterior del Mistral se inspira en algunos de sus antepasados, sobre todo en el mencionado Type 57 Roadster Gran Raid, pero también toma prestadas algunas soluciones del Chiron y hereda rasgos de las últimas creaciones de la marca, como las luces traseras en forma de X del Bugatti Bolide.
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