Peugeot RCZ: aquella vez que los galos fabricaron un coupé deportivo para robar la mirada del mundo
Peugeot es una casa conocida por sus diseños sumamente atractivos y por tener historia al haber creado coches de carreras ganadores en distintas disciplinas del deporte motor, desde prototipos en resistencia, hasta maquinas invencibles en los rally. Sin embargo, en tiempos recientes su enfoque se tornó más a la venta de coches pequeños y eficientes con algunos SUV y sedanes que apuntaban más a lo sobrio. Para sorpresa de todos en 2010 le dieron al mundo un auto digno de robar miradas y enamorar entusiastas, el Peugeot RCZ.
Un concepto que nació del famoso 308
El Peugeot RCZ nació como un concepto para el Auto Show de Frankfurt de 2007 que tomaba como base al 308 y le daba una carrocería Coupé, era un modelo prácticamente solo pensado en mostrar algunos avances de diseño, pero terminó gustando tanto a los asistentes que la marca no dudo en comenzar el trabajo para tener una variante de producción.
El tiempo pasó y durante el Auto Show de Frankfurt de 2009 la marca presentó al Peugeot RCZ de producción que se pondría a la venta al año siguiente en 2010 y que llegaría a varios mercados, incluyendo México. La sorpresa para muchos es que no cambió mucho respecto al modelo del concepto, incluso conservó la luneta con forma de doble burbuja y los arcos en de aluminio que formaban la cabina.
El Peugeot RCZ se convirtió en el primer modelo que en su nombre no llevó un "0" al centro en más de ocho décadas.
Con este auto, Peugeot pretendía volverse a poner en el camino de los coches deportivos realmente efectivos y llamativos. Este auto usó la misma plataforma del 308, compartían la misma distancia entre ejes, aunque sus vías eran más anchas en ambos ejes, además la suspensión era más baja, todo con el fin de tener un centro de gravedad más cercano al suelo. Uno de sus elemento más importantes era el alerón trasero activo que acorde a la velocidad podía colocarse en dos posiciones para ayudar a controlarlo mejor.
El interior del RCZ era algo más conservador que su exterior, aunque solo en diseño, ya que en calidad usaba materiales apropiados e incluso contaba con paquetes especiales que extendían el tapizado en piel hasta el tablero. En comodidad solo los pasajeros frontales podían disfrutar, pues a pesar de ser un 2+2, los asientos traseros eran más una formalidad. A pesar de ello sí contaba con una cajuela decente con capacidad de 384 litros — cuatro litros más que los que lleva un SEAT León o Volkswagen Golf actuales—.
Bajo el cofre el RCZ llevaba un motor turbo de cuatro cilindros de 1.6 litros en las versiones menos potentes solo producía cerca de 156 hp, mientras que en la más potente llegaba a los 197 hp. Sin embargo tiempo más adelante se presentó el RCZ R una variante vitaminada que de ese mismo motor podía extraer 270 hp.
Estuvo disponible con caja manual de seis cambios o una automática que llevaban el poder sólo al eje delantero. Su 0-100 km/h podía tomarle hasta 9 segundos en las versiones menos potentes o 5.9 segundos en el RCZ R. Este auto fue recibido con buenas críticas y formó cierta popularidad, sin importar que no hubiera una variante de tracción trasera.
Su último año modelo fue el 2015 y no dejó de producirse porque fuera mal producto, como muchos de los coches que nos gustan y salen del mercado, su razón para partir fue la baja de ventas, además de pertenecer a un segmento muy limitado y un precio relativamente alto, al menos para México. A nivel global, la fiebre del SUV también tuvo mucho que ver con que dejará de fabricarse.
El Peugeot RCZ será recordado por ser un ícono de diseño que revitalizó una parte más emocional de la marca. Ahora hay quienes siguen con la esperanza de ver una reinterpretación del modelo que si siguiera el diseño actual que tiene la marca, seguro sería una pieza digna de museo. Si bien el Audi TT tuvo algo de influencia en que Peugeot decidiera fabricarlo, no estuvo planeado para competir con él directamente, especialmente al tener en cuenta que el TT contaba ya con variantes muy enfocadas a la conducción en circuito. ¿Tienes alguna anécdota con él? ¡Cuéntanos!
