Básicamente, una deducción, es un gasto que, de acuerdo a las leyes fiscales, puede restarse de los ingresos obtenidos con la finalidad de pagar menos Impuesto Sobre la Renta. Si tienes un automóvil, es posible que puedas deducir algunos gastos con él. El Servicio de Atención Tributario (SAT) tiene algunos lineamientos al respecto, cuando el auto del que eres propietario es utilizado con fines profesionales.
Desde 2016, la Ley del Impuesto Sobre la Renta (LISR), ingresó los gastos automotrices en la categoría de deducción de impuestos y se puede aplicar en los siguientes anexos:

Mantenimiento
Estos gastos deducibles se aplican con relación a la compra de llantas, refacciones en general, así como aceite y hasta líquido anticongelante. En el servicio al vehículo también es posible deducir; si realizas la afinación, balanceo, cambio de aceite o algún tipo de descompostura interna o exterior, con el comprobante de pago o factura expedida por quien preste estos servicios, podrá realizarse la deducción pertinente.
Combustible
De acuerdo con la LISR, es posible deducir hasta 200 pesos diarios si es un automóvil que utiliza gasolina o diésel; en caso de que sea un auto eléctrico o híbrido, se podrán hacer deducibles hasta 285 pesos diarios.

Seguro
En este caso depende del tipo de situación fiscal que tengas y, a partir de ello, podrá o no ser deducible el seguro del auto. Por ejemplo, si eres una persona física con salario, el seguro de auto no es deducible. En cambio, si eres una persona física con actividad empresarial, y utilizas el automóvil para cumplir obligaciones laborales que son la generación de tus ingresos, sí puedes deducir el seguro de auto.
Renta o arrendamiento financiero del auto
De acuerdo con la Ley de Impuestos Sobre la Renta en un arrendamiento automotriz se puede deducir el Impuesto sobre la Renta (ISR) y acreditarse el Impuesto al Valor Agregado (IVA). Este beneficio lo pueden utilizar personas morales, físicas, con actividad empresarial.

Trámites
Existen trámites vehiculares por los que debes pagar, pero que son deducibles de impuestos como son la verificación vehicular y pago de tenencia, siempre y cuando el auto y todos sus trámites y documentos estén a tu nombre como persona física o moral.
Para poder deducir gastos a través de un auto es necesario contar con RFC y estar inscrito en el Registro Federal de Contribuyentes; comprobar que el automóvil es esencial para el desarrollo de la actividad profesional que realizas; contar con Comprobantes Fiscales Digitales (CFDI) de gastos para deducir ante el SAT, mientras que el vehículo debe estar a tu nombre. En caso de que pertenezca a un tercero, comprobar para qué actividades se destina.
Ver 0 comentarios