Chevrolet apuesta fuerte por el Spark EUV, así que ya comenzó a fabricarlo también en Latinoamérica

La estrategia de traer vehículos de China y venderlos con el emblema de Chevrolet ha resultado todo un éxito en la región, sin embargo, hay un punto más importante y es la importancia que han ganado a nivel regional, a tal punto que la marca ya empezó a fabricarlos en Latinoamérica. 

El Chevrolet Spark EUV es el primer auto de origen chino que se fabrica en LATAM, pues apenas ayer se dio bandera verde a la manufactura regional, armándose en la planta de Horizonte, en el estado de Ceará, Brasil. 

Esta fábrica recibió una millonaria inversión para poder modernizar las líneas de ensamble, ya que el objetivo es recibir a nuevos modelos originarios de China, como la Chevrolet Captiva EV, que es una variante distinta a la recién lanzada Captiva PHEV. 

Por el momento la producción brasileña de Chevrolet Spark EUV será para satisfacer las demandas del mercado local, pues incluso no es un ensamble completo. Parte del vehículo ya llega prefabricado desde la planta de Baojun en China, y en Brasil se terminan de instalar algunos componentes. 

No obstante, el proyecto contempla que conforme avancen los meses y crezca la demanda, se eleve el porcentaje del ensamble que se realiza en Brasil, e incluso no podemos descartar que esta fábrica exporte a otros mercados del continente los productos terminados, que son idénticos a los modelos provenientes de China. 

Este Chevrolet Spark EUC es el mismo producto que se vende en México. También tiene una batería de 42 kWh y una autonomía menor a 300 km. Por allá su precio es de 159.990 reales, que equivalen a casi $550,000 pesos mexicanos, por lo que en México es considerablemente más accesible ($449,900 pesos). 

Por otra parte, el Chevrolet Spark EUV no es el primer automóvil chino que se fabrica en la región. Años atrás, el Chevrolet Onix se comenzó a producir en México, sin embargo, la pandemia y otros factores dificultaron una producción regular y poco tiempo después se decidió regresar toda la manufactura a China. 

No sería una sorpresa que la producción de otros productos creados en China se mande a algunos países de Latinoamérica, pues incluso hay marcas chinas que ya comenzaron a abrir plantas de ensamble en la región, como BYD, que ya opera una fábrica en Brasil.