
Si estás en Detroit, es muy fácil llegar accidentalmente a Canadá a través del puente Ambassador. Si bien hay muchas señales sobre la autopista e incluso pintadas en la carretera, con las constantes obras y el alto tráfico en la zona, es muy común llegar a dicho puente sin querer, sin embargo, este descuido podría cambiar tu vida de la noche a la mañana.
De acuerdo con el New York Times, resulta que Ricardo Prada Vásquez huyó de su país natal, Venezuela, y buscaba asilo en Estados Unidos. De hecho, radicaba en la Unión Americana de manera legal, a través de la aplicación CBP One, la cual permite a los solicitantes pedir asilo, para notificar a la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) sobre su intención de regularizar su estatus, mientras escapan de regímenes represivos y violentos.Llevaba cuatro meses en Estados Unidos y trabajaba como repartidor de comida cuando, el pasado 15 de enero, entró accidentalmente en la plaza del Puente Ambassador.
Pero una vez en ese sitio, no hay marcha atrás: tienes que ir a Canadá. Si eres ciudadano estadounidense y llegas sin pasaporte ni tarifa de cruce pagada, la patrulla fronteriza del lado estadounidense te regaña y luego te envía al otro lado del puente, sólo para que la patrulla fronteriza del lado canadiense te regañe de nuevo, quien te envía de vuelta para tu tercera y última reprimenda en el lado estadounidense.
Pero para Ricardo Prada, quien se encontraba legalmente en Estados Unidos y a la espera de una audiencia de inmigración, las consecuencias de un giro equivocado fueron mucho peores.
“Las autoridades estadounidenses detuvieron al Sr. Prada cuando intentó reingresar al país; lo detuvieron y ordenaron su deportación. El 15 de marzo, le contó a un amigo en Chicago que se encontraba entre varios detenidos alojados en Texas, que esperaban ser repatriados a Venezuela.
“Esa noche, la administración Trump voló tres aviones que transportaban migrantes venezolanos desde las instalaciones de Texas a El Salvador, donde han estado desde entonces, encerrados en una prisión de máxima seguridad y sin contacto con el mundo exterior.
"Simplemente ha desaparecido", dijo Javier, un amigo en Chicago, la última persona con la que el Sr. Prada tuvo contacto. El amigo habló del Sr. Prada con la condición de que sólo se le identificara por su segundo nombre, por temor a que él también pudiera ser blanco de las autoridades migratorias”, publicó el New York Times.
Prada entró legalmente a Estados Unidos vía México, el 29 de noviembre de 2024. Tras su detención en enero, fue trasladado de un centro de detención, en Estados Unidos como en México. La última vez que se supo de él fue en marzo, cuando les dijo a sus amigos que creía que lo estaban enviando a Venezuela. Luego, nada más.
Imágenes: Reuters