Hay ciudades tan frías, que deben dejar sus autos encendidos toda la noche: si los apagan, no volverían a arrancar

Hay ciudades tan frías, que deben dejar sus autos encendidos toda la noche: si los apagan, no volverían a arrancar
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En ciertos países del mundo, principalmente en aquellos donde las temperaturas invernales alcanzan extremos, es común observar una práctica que podría sorprender a más de uno en México: dejar el auto encendido durante el invierno. Pero este comportamiento, que podría parecer un derroche de combustible o una excentricidad, tiene una razón práctica vinculada a los retos que representa el clima extremo.

Ciudades Frias Autos No Encienden

En países como Canadá, Rusia y algunas regiones del norte de Estados Unidos, las temperaturas invernales pueden descender fácilmente por debajo de los -20°C. En estas condiciones, el aceite del motor tiende a espesarse, lo que dificulta la lubricación necesaria para el correcto funcionamiento del auto. Mantener el motor encendido permite que el aceite se mantenga a una temperatura adecuada, lo que previene daños y facilita un mejor rendimiento.

Además, el frío extremo afecta la batería de los automóviles, reduciendo significativamente su capacidad para generar la energía necesaria para arrancar el motor. Al dejar el auto en marcha, se asegura que la batería conserve su carga y que el vehículo esté listo para ser utilizado cuando se necesite.

Gasolina congelada

Las ciudades rusas de Yakutsk, Norilsk y Vorkutá son famosas por sus inviernos especialmente crudos, que pueden llegar a debajo de -50 °C. Yakutsk, ubicada en la región de Siberia oriental, registró -64.4°C en 2015, una de las temperaturas más bajas registradas fuera de la Antártida. La gasolina tiene un punto de congelación de -60°C, por lo que en estos ambientes, incluso el combustible de los autos puede hacerse hielo.

“Si paras el motor, a los 20 minutos se congela el aceite, se congela el motor y no lo revives”, contó en un video Ramilla de Aventura, un youtuber que visitó la ciudad de Yakutsk en invierno y fue testigo de este fenómeno con los autos.

Pero otro motivo importante es la comodidad. En regiones donde el viento helado y la nieve hacen que la sensación térmica sea aún más baja, el interior del auto puede convertirse en un refugio cálido. Dejar el motor encendido garantiza que el sistema de calefacción mantenga una temperatura agradable dentro del vehículo, especialmente si el conductor planea regresar pronto.

Aunque esta práctica puede ser útil, también tiene sus desventajas. Mantener el auto encendido por largos periodos consume una cantidad considerable de combustible y genera emisiones contaminantes.

Para contrarrestar estos problemas, muchas personas en estas regiones utilizan dispositivos conocidos como calentadores de bloque o block heaters, que se conectan a la electricidad, se introducen en el cofre y mantienen el motor caliente sin necesidad de arrancarlo.

Algunos estacionamientos públicos están equipados con estos dispositivos, o los dueños los adquieren (por unos 500 dólares), pero dependen de la posibilidad de estacionar cerca de una fuente de electricidad. La otra opción, utilizada por quienes viven en edificios de departamentos, es guardarlos en sus cocheras con calefacción, donde los autos están protegidos y pueden apagarse con normalidad.

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