Nueve particularidades que son sinónimo de lujo al volante

Nueve particularidades que son sinónimo de lujo al volante
Sin comentarios

Advertisement

Bien dicen por ahí que “Dios está en los detalles”, pues son estos los que, de alguna manera marcan una diferencia al momento de tener una experiencia. Dicha frase implica que en hay ciertas particularidades que conducen cualquier aspecto de la vida a otro nivel, a una posición donde el lujo enriquece las vivencias. Ahora, cuando se aplica a los automotores, el sentir al colocarse al volante cambia.

¿Qué tanto? Bueno, eso depende de los puntos que se puedan catalogar como lujo. Ahora, si definimos el concepto como: “medios que exceden lo necesario para satisfacer una necesidad”, podemos colocar en este escaño todas las pequeñas cosas que “adornan” y llevan un paso más allá el cumplimiento de un requerimiento básico.

Un conductor puede considerar lujo muchas características en algunos autos, pues básicamente requerimos los vehículos para transportarnos. Claro que no es lo mismo hacerlo en un coche subcompacto con el equipamiento mínimo, que en una SUV, con confortables asientos de piel, avanzados sistemas de conectividad, cámaras y sensores para ver y detectar objetos alrededor, bocinas con una alta calidad de audio y faros LED, entre muchas otras cosas.

El lujo se ve y se siente

Koleos Lujo Ba1

Las características que nos ayudarían a definir qué es el lujo nos llevan a pensar en lo exclusivo, selecto, innovador, único y prestigioso, por ello enlistamos algunas particularidades que podrían llevar la experiencia de conducir a otro nivel.

Diseño: Sabemos que “de la vista nace el amor”, así que una presencia estética elegante y sofisticada en un vehículo atraería las miradas y, de alguna manera, esas características se proyectarían al conductor -quien sería percibido como alguien con estilo-.

Una carrocería robusta, parrilla cromada, faros LED, rines de aluminio bitono, insertos cromados y líneas vanguardistas, son características que combinadas en un vehículo serían percibidos como un ejemplo de sofisticación. Este tipo de detalles en el diseño pueden seducir a cualquiera.

Construcción y materiales: Después del diseño, la calidad en esta característica es la que nos hace sentir que nos encontramos en un auto de lujo. Encontrar al interior materiales como la piel perforada sobre los asientos, detalles cromados y líneas definidas en la cabina cambian nuestra percepción de lo que es conducir. Además, cuando los accesorios y aditamentos sobre el tablero y el resto de los espacios se integran de una forma natural, se afianza la impresión de que todo está pensado para mejorar la experiencia desde el interior.

Atmósfera interior: La amplitud y el aprovechamiento de cada espacio al interior para ofrecer comodidad al conductor y los pasajeros es, en algunos segmentos, sinónimo de lujo. No todos los vehículos ofrecen la creación de una atmósfera de confort. Por ejemplo, en el segmento de las SUVs, Renault Koleos, que cuenta con una de las carrocerías más largas del mercado (4.67 metros) no promete una capacidad para más de cinco personas, la idea es que cada individuo disfrute del viaje.

Koleos Lujo Ba5

Conectividad: En la actualidad, los dispositivos forman parte esencial de cada día, así que contar con sistemas que permitan integrar sus capacidades (y contenidos) harían al conductor experimentar viajes más placenteros y, de alguna manera, personalizados. De manera que poder enlazar smartphones vía Bluetooth o una entrada auxiliar, se valora.

Control de mando y tecnología en cabina: ¿Se consideraría un lujo contar con un lector de correos electrónicos? ¿Qué tal una interfaz interactiva de control sobre una pantalla tipo tablet de 8.7 pulgadas? ¿Y la capacidad de controlar estéreo y aire acondicionado, entre otros, a través de comandos de voz? Sí, eso definitivamente es algo exclusivo, así que consideremos que son características que exceden la satisfacción de una necesidad.

Personalización: Algo que distingue el lujo es la capacidad de personalizar un objeto o un vehículo, eso es lo que lo haría único y selecto. Así que si se desea una SUV capaz de ofrecer esa posibilidad habría que preferir aquellas marcas que permitan escoger cuestiones puntuales: desde el color de los interiores y exterior, hasta la capacidad de dar un toque propio a la iluminación en cabina, o incluso elegir el diseño del tablero.

La mayor seguridad: Sabemos que para salir al mercado, los vehículos deben cumplir con una regulación que establece un mínimo de seguridad y, bueno, cada fabricante sabe qué tanto excede ese límite mínimo. Tomemos el vehículo ya mencionado -Koleos- y veamos qué hizo Renault, en este caso se le puso a esta SUV frenos ABS, sistema de asistencia de frenado de emergencia (SAFE), distribución electrónica de frenado (EBD) y un sistema electrónico de estabilidad (ESP); además de un regulador/limitador de velocidad, sensores traseros y delanteros, así como monitores del punto ciego y tarjeta inteligente de encendido y apagado.

Asistente de estacionado: Lujo es que tu auto se estacione sin que toques el volante y, sí, hay vehículos capaces de hacerlo. Claro que para ello deben combinar una gran cantidad de sensores y monitores para que el sistema que viene instalado en el auto pueda realizar los cálculos de distancia y espacio a fin de maniobrar y tomar el control de la dirección de una manera correcta.

Máxima calidad de sonido: Hay muchas opciones, pero los que saben de calidad de audio recomiendan los sistemas desarrollados por la marca Bose, los cuales permiten disfrutar de una acústica envidiable al interior del vehículo. Este es un lujo que deleitaría los oídos de los pasajeros, sólo habría que realizar una buena elección de temas para que la sofisticación que se proyecta con el vehículo no se vea manchada.

Koleos Lujo Ba4

Al final, se trata de contar con una vivencia de manejo superior, que haga de cada kilómetro el mejor recorrido. Muchas veces, al elegir un vehículo hay que decidir entre una característica y otra, pues resulta un verdadero lujo tenerlas todas, pero al final también hay que valorar el tipo de experiencia se quiere tener.

Comentarios cerrados
Inicio