Uno de los planes más ambiciosos el Grupo PSA en su plan de acción del año 2019 era la reintroducción de Peugeot en el mercado estadounidense, sin embargo, la creación de Stellantis junto al Grupo FCA ha dejado en un punto muerto estas acciones y el mismo Jean-Philippe Imparato, cabeza del grupo PSA, ha cuestionado el desembarco de la firma francesa en Norteamérica.
Durante el primer trimestre del año 2019 Groupe PSA presumió al mundo su nuevo plan de expansión global para sus marcas Peugeot, Opel y Citroën a mercados nunca antes vistos, con Opel fijando su mirada en el mercado ruso, Citroën con destino en la India y Peugeot queriendo insertarse dentro del mercado estadounidense.
Esta nueva ruta indicaba que Peugeot debería desembarcar en Estados Unidos para el año 2023, con una hoja de ruta inicial propuesta por el entonces CEO del grupo, Dominique Larry, donde los Peugeot 3008 y 5008, dos modelos tipo SUV, deberían ser la punta de lanza para que la marca consiguiera posicionarse rápidamente en uno de los mercados más importantes del mundo.
La creación de Stellantis cambió el panorama
Todo esto parecía ser un plan exitoso y ambicioso que debía ejecutarse con la precisión de la maquinaria de un reloj, pero al paso del tiempo y con la materialización de una fusión entre Fiat Chrysler Automobiles (FCA) y Peugeot Société Anonyme (PSA) en un nuevo y gigantesco conglomerado automotriz mundial llamado Stellantis, parece ser que la firma del león no logrará regresar a Estados Unidos, al menos por ahora.
El mismo Jean-Philippe Imparato, CEO de Groupe PSA, comentó en una entrevista que la entrada de Peugeot a Estados Unidos ha quedado en entredicho y aseguró que “Peugeot se concentrará en sus principales mercados que son Europa, Medio Oriente, África y Latinoamérica, al tiempo que nuestro nuevo objetivo se convierte una vez más en retomar el rumbo a China”.
Peugeot en Estados Unidos no es algo prioritario
Por su parte, Carlos Tavares, CEO de Stellantis, aseguró el regreso de Peugeot a Norteamérica no es un movimiento estratégico prioritario para el grupo automovilístico, por lo que decidieron mandar a la congeladora esa reintroducción para centrar sus ventas en otros territorios donde la firma francesa ha logrado crear una gran reputación y buenos números de ventas, entre ellos Latinoamérica.
De acuerdo con la información dada a conocer por L´argus, Tavares aseguró que esta decisión se ha tomado para evitar competencias al interior del nuevo conglomerado automotriz s que puedan perjudicar a los fabricantes antes de beneficiarlos, indicando que las marcas ya presentes en el mercado estadounidense tienen cifras de ventas saludables para Stellantis, por lo que no tienen necesidad de hacer movimientos a la ligera.
“Las marcas de Stellantis representan el 12 por ciento de la participación del mercado en los Estados Unidos y apostamos por un crecimiento rentable antes que por introducir una nueva marca a competir en el mercado”, agregó, dejando claro que, además, la situación actual en la que enfrentamos a la pandemia por Covid-19 es un modelo muy riesgoso para realizar movimientos de esta índole.
