Nissan X-Trail, prueba (parte 1)

Nissan X-Trail, prueba (parte 1)
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La completamente nueva Nissan X-Trail ha llegado a México, y esta vez busca consagrarse en un nuevo segmento ya que la "SUV ligera" ha ganado un poco de tamaño y como consecuencia, espacio.

Si consideramos que en otros mercados la X-Trail es comercializada como la nueva Rogue, mientras que en México ésta ya no será vendida, podemos entender que esta nueva generación es como una combinación de ambas camionetas.

Más grande que sus rivales

Como te lo mencionábamos, olvídate de la X-Trail cuadradita que sería una SUV compacta; la Nissan ahora se siente como una SUV completa. No importa que la marca busque comercializarla como una SUV ligera o inclusive una CUV que compite con los semejantes de Mazda CX-5 o Honda CR-V, desde que la vez hasta que te subes, estás consciente que ésta es de un tamaño mayor a su competencia.

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Tan es superior su tamaño que inclusive la puedes pedir con una tercera fila de asientos (la versión que probamos era de dos hileras), que aunque cuentan con un espacio reducido para las piernas, nunca está de más tener cancha para meter a dos que tres niños extra, o alguna otra carga que carezca de piernas del tamaño de un adulto. Además cuentas con un buen espacio de cajuela como complemento.

El tamaño es relativo

Aunque la X-Trail es espaciosa, realmente sientes que estás manejando un auto de menores dimensiones. Esto se refleja en dos factores principales. El primero es cuando maniobras por espacios reducidos donde estás seguro que una camioneta de ese tamaño no cabría, tiendes a terminar sorprendido de lo estrecha que es la camioneta en sus dimensiones exteriores. La segunda es la maniobrabrilidad del auto combinada con la suficiente potencia proporcionada por el cuatro cilindros de 170 hp y 170 lb/ft de torque.

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Al conducir en carretera y curvas, la X-Trail no se siente tanto como una SUV y mucho menos de sus dimensiones. Lógicamente esto no significa que la puedas manejar como un sedán, pero si otorga una mayor confianza gracias a la conducción suave, sin ser extremadamente blanda y que comunica con suficiencia lo que está pasando en el pavimento.

Por otra parte, el tren motriz parece estar hecho a la medida para la camioneta. Si bien no significa que el motor entrega un desempeño extraordinario, si se siente muy en sintonía con el auto y con la transmisión CVT. Ambos responden cuando es necesario con un retraso muy poco perceptible, mientras que en situaciones no extremas donde es necesario el torque, éste está disponible sin mucho esfuerzo. El único problema que encontramos es que el motor vibraba mucho a bajas revoluciones, aunque creemos que esto es un caso relacionado a la unidad que nos proporcionaron y no es generalizado.

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Continuará...

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