Chevrolet Groove, a prueba: qué sí 👍 y qué no 👎 del SUV más barato de GM en México

Nota de Motorpasión México

En ese afán por ofrecer SUV de todos los colores, tamaños y sabores, General Motors se trajo el Chevrolet Groove a México para convertirlo en su SUV más accesible. Adoptado desde China, este pequeño crossover quiere convertirse en un buen aliado para moverse entre calles y semáforos, con una buena dosis de equipamiento y el sabor todoterreno que tanto gusta a los fanáticos de los SUV. ¿Vale la pena? Lo tuvimos a prueba.

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El Chevrolet Groove es el hermano menor de Tracker —aunque sólo es 5 cm más corto—, pero es adoptado. No se trata de un modelo desarrollado propiamente por Chevrolet, sino por Baojun, una marca china de bajo costo que forma parte de los socios globales de General Motors.

Curiosamente, quizá por coincidencia, su diseño sí encaja con lo que encontrarías en un modelo de Chevrolet. Las luces diurnas a margen del cofre y los faros principales instalados en la fascia recuerdan a modelos como Blazer, aunque sin la parrilla de doble puerto, en el caso de Groove.

Su punto fuerte es el equipamiento

Tenemos el prejuicio de que todos los vehículos que vienen de China son corrientes. El Chevrolet Groove quiere acabar con ese estigma, salvo por detalles muy específicos. Su calidad general convence. Las piezas que simulan aluminio cepillado lucen bien, y el hecho de llevar cuero con costuras en contraste en el tablero realza la sensación de calidad. Botones y perillas también tienen el tacto correcto.

Los únicos aspectos que no me encantaron fueron la interfaz el sistema de infotenimiento, que se ve algo genérica y con letras pequeñas; los gráficos de la computadora de viaje, que lucen muy sencillos; y algunos ajustes entre piezas que dejan margen de mejora al ensamble. En lo demás, encaja con el estándar de calidad de la categoría.

Desde el puesto del conductor es fácil leer los instrumentos. La posición de la pantalla ayuda a seguir las instrucciones de los mapas —no lleva navegación nativa, pero sí compatibilidad con Android Auto y Apple CarPlay. Lo que ni yo ni ninguna persona del equipo fue capaz de encontrar fue una posición de manejo ideal. El volante sólo tiene ajuste de altura, pero no de profundidad, y el poste A no facilita la visibilidad al dar vuelta.

Hablemos de equipamiento, que sin duda —y junto al diseño— es el punto más destacable del Chevrolet Groove. Por menos de 400,000 pesos incluye techo panorámico, asiento del conductor con ajuste parcialmente eléctrico, llave inteligente, control de velocidad crucero, cámara y sensor de reversa y faros de LED. Lo único que eché de menos fue un encendido automático de faros y vidrios eléctricos de un toque; sólo el del conductor lo es, y exclusivamente para bajar la ventana.

En cuanto a confort cumple y hasta sorprende, pero donde indudablemente se queda corto es al hablar de seguridad. Al no ser un modelo original de General Motors, Chevrolet está condicionada a aceptar la configuración bajo la que Baojun fabrica el Groove en China, que en este caso es de sólo cuatro bolsas de aire, en vez de seis. Complementa con frenos ABS y control electrónico de estabilidad.

En lo que respecta a espacio, el Groove es un SUV pequeño, por lo que no podemos exigirle demasiado, aunque para medir 4.22 metros de largo, la banca trasera aprovecha muy bien el espacio. El respaldo es reclinable y hay buen lugar para piernas y cabeza, además de un túnel central casi plano. No lleva salidas de A/C traseras ni un descansabrazos para quienes viajen atrás, pero sí un puerto USB de carga. La cajuela, por su parte, reporta un volumen de 320 litros.

Al volante, el Chevrolet Groove es 100% urbano

El Chevrolet Groove fue concebido como un SUV para la ciudad, y eso se nota desde que miramos su ficha técnica. Su motor de 1.5 litros de 108 hp y 111 lb-pie es muy similar al de otros autos pequeños de General Motors en México, como el de Aveo.

Con estos números, el Groove se mueve con cierta fluidez entre calles, pero habrá que ser calculadores al rebasar o incorporarse a vías rápidas, porque la potencia no sobra y la transmisión automática CVT prioriza el ahorro antes que el desempeño. Busca viajar a bajas revoluciones, tanto que a veces le cuesta trabajar subir pendientes.

El lado amable de la combinación entre este motor y esa transmisión es el rendimiento de combustible, que en ciudad rondó 11.9 km/l bajo condiciones de tráfico. Se puede configurar un modo ECO al oprimir un botón cerca de la palanca de cambios, o bien, pasar la transmisión a modo deportivo.

El manejo también encaja con el perfil de un vehículo urbano. El Chevrolet Groove reacciona con gran suavidad. Su suspensión es blanda y se siente robusta al pasar por baches, aunque su misma suavidad tiende a provocar algunos rebotes y a inclinar la carrocería en curvas, aun viajando a velocidad media.

La dirección también tiene un tacto ligero y aunque no es muy comunicativa, ayuda a una conducción relajada en la ciudad. Quizá en carretera se agradecería algo más de precisión. Quizá el único aspecto importante a revisar sean los frenos, que a pesar de incluir ABS y discos en las cuatro ruedas, no tienen una mordida tan potente como los demás SUV de esta categoría.

Su precio de partida es de 332,900 pesos

El Chevrolet Groove quiere llevarse una buena rebanada de las ventas en la categoría de los SUV más accesibles de México, ahí donde también participan el MG ZS y el Renault Duster. Por equipamiento y confort, convence, pero al momento de mirar el precio nos damos cuenta que su mayor enemigo se encuentra en casa.

El Chevrolet Groove Premier tiene un precio de 390,900 pesos, es decir, 200 pesos más barato que el Chevrolet Tracker LS automático. Hay diferencias de equipamiento entre ambos modelos, pero Tracker mantiene lo más relevante y gana mucho en cuanto a manejo, muchísimo en cuanto a respuesta del motor y todavía más en términos de seguridad y calidad. Si me lo preguntas, iría antes por Tracker que por Groove, aunque habrá quienes tengan un presupuesto más ajustado, al que se adaptan mejor las versiones más accesibles de Groove.

7.5

Acabados8
Seguridad7
Equipamiento8.5
Infotenimiento8
Comportamiento6
Motor7
Transmisión7
Consumo9
Espacio7.5
Precio7

A favor

  • Diseño interesante entre los B-SUV de entrada.
  • Buen nivel de equipamiento.
  • Rendimiento de combustible adecuado.

En contra

  • No lleva airbags de tipo cortina.
  • El motor queda justo en potencia.
  • Suspensión muy suave con gran tendencia a body-roll.

Chevrolet Groove Premier

$390,900

  • Motor: 4 cilindros de 1.5 litros
  • Potencia: 110 hp @ 5,800 rpm
  • Par: 108 lb-pie @ 3,600 rpm
  • Transmisión: Automática CVT
  • Tracción: Delantera
  • Frenos: Disco / disco
  • Peso: 1,260 kg
  • Suspensión delantera: Independiente tipo McPherson
  • Suspensión trasera: Barra de torsión
  • Longitud: 4,220 mm
  • Cajuela: 320 litros
  • Consumo en ciudad: 11.9 km/l
  • Capacidad del tanque: 45 litros
  • Fabricado en: China
  • Costo de mantenimiento (3 años): 17,236 pesos

Agradecemos a Estacionamientos Deprisa por el espacio para la realización de la sesión fotográfica. Para más información acerca de sus instalaciones, visita su página web.

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