A lo largo de 10 años, Pagani ha lanzado algunas variantes de su deportivo Huayra, pero era de esperarse que se hiciera algo similar a lo que en su momento se realizó con el Zonda R, la variante más radical que puede existir, y hoy Huayra R es una realidad.
¿En qué se basan para considerarlo tan radical? Básicamente en que el propulsor no es algo que se vea todos los días, hablamos de un poderoso V12 de aspiración natural, capaz de producir 850 hp y un par de 553 lb-pie, que además es capaz de girar a las 9,000 vueltas. Si eso no te parece destacable, entonces hablemos de su peso, ya que en la báscula marca 198 kg y eso sí es sobresaliente.
La transmisión en este caso es accionamiento manual con seis relaciones, de marchas cortas y precisas, digna de un auto de semejante categoría.
Este bloque además de su poder y su ligereza, produce una sinfonía similar a la de aquellos Fórmula 1 de motores similares. Melodía que puede regularse a través de un opcional sistema de silenciadores para su uso en lugares con restricciones sonoras.
El monocasco está fabricado con materiales que garantizan la ligereza y rigidez necesaria para un performance adecuado, además de otorgar un peso final de 1,050 kg que junto con la aerodinámica implementada en la carrocería que es una especie de Zona R pero evolucionado, conformada por prominentes entrada de aire, difusores y un par de aletas unidas al spoiler trasero, generan una impresionante carga aerodinámica de 1,000 kg a 320 km/h.
Al tratarse de un auto enfocado en el uso en circuito, el esquema suspensión tiene varios elementos como amortiguación controlada electrónicamente, doble horquilla independiente con resortes helicoidales. Los neumáticos están a cargo por supuesto de Pirelli con unos P Zero y la frenada es llevada a cabo por frenos de disco carbono cerámicos.
El interior no fue revelado, no al menos en las imágenes del fabricante pero por la naturaleza del auto, es casi un hecho que el diseño será semejante a un auto de carreras.
Solamente serán fabricadas 30 unidades de este Huayra R y para el momento en el que estés leyendo estas líneas es probable que ya tengan dueño, después de haber pagado 2.6 millones de euros, equivalentes a más de 63 millones de pesos. ¡Una locura!