Una prueba de Tesla pone en evidencia lo lejos que estamos realmente de los coches autónomos: no reaccionan ante objetos sobre la carretera

Pablo Monroy

En 2016, el director ejecutivo de Tesla, Elon Musk, afirmó que, para finales del año siguiente, 2017, el fabricante de automóviles realizaría un viaje de costa a costa, desde Los Ángeles a la ciudad de Nueva York, confiando únicamente en su sistema de asistencia al conductor. Ha pasado casi una década desde que se hizo esa promesa y hasta el momento no se ha realizado ninguna travesía.

Sin embargo, un entusiasta de Tesla en YouTube decidió realizar su propia prueba en un Model Y renovado con conducción autónoma total y ya podemos adelantarte que el viaje no fue del todo bien.

Vale la pena recordar que el sistema de conducción autónoma total (supervisado) de Tesla está oficialmente clasificado en el Nivel 2, lo que significa que sigue siendo una función de asistencia al conductor, mas no un sustituto del control humano. De hecho, se espera que los conductores permanezcan alertas en todo momento y estén listos para tomar el control de inmediato, sin importar cuán avanzado parezca el software.

Con este antecedente, el auto inició el viaje de Los Ángeles con destino a Jacksonville, Florida, pero tras recorrer apenas 96 kilómetro el conductor se encontró con un objeto en medio de la carretera. Mientras el Model Y avanzaba a 120 km/h, el conductor esperaba que el sistema de conducción autónoma detectara el objeto y se desviara rodeándolo, pero nada más alejado de este planteamiento.

Resulta que, a medida que conductor se dirigía hacia el objeto, rápidamente se dio cuenta de que se trataba de una gran rampa de acero, que probablemente se había caído de un camión. Si bien cualquier conductor astuto la hubiera detectado a tiempo y cambiarse de carril, lo cierto es que este tipo no lo hizo.

El desenlace fue el que esperabas: el Model Y se estrelló directamente contra la rampa de acero con tal fuerza, que levantó por un instante el Tesla del suelo, antes de volver a golpear la carretera. El conductor se detuvo rápidamente para evaluar el daño. En la primera inspección, el daño no parecía tan grave y continuaron conduciendo varios cientos de kilómetros, antes de decidir inspeccionar el automóvil con un mecánico.

Después de levantar el auto en una rampa, descubrió que la barra estabilizadora se llevó la peor parte del impacto y el soporte se arruinó. Además, varios componentes de la suspensión resultaron dañados, lo que impidió que la unidad de transmisión delantera funcionara.

Esta no es la primera ni la última prueba de la conducción autónoma de un vehículo ya que, en agosto pasado, el medio de comunicación chino Dongchedi, filial de ByteDance (empresa dueña de TikTok) en colaboración con la televisión estatal CCTV, organizó una prueba real a gran escala de las asistencias a la conducción a 36 modelos de coches de una veintena de marcas mundiales. Las conclusiones sorprenden por los decepcionantes resultados de muchas marcas chinas.

Resultó inquietante que muchos de los coches ni siquiera reconocieran que habían sufrido un choque y continuaran su desplazamiento hasta que el conductor humano interviniera para poner fin a la prueba.

El estudio concluyó que los sistemas “no tienen las normas de tráfico integradas en su base de datos, ni consideran su cumplimiento como una prioridad máxima. Es como si nadie les hubiera enseñado a seguir las normas, y tampoco lo han aprendido de los datos de los usuarios”.

Recordemos que estos sistemas usan una base de datos que, además de las normas de tráfico que deben incorporar, recopila la forma en que manejamos, para determinar la mejor forma de actuar ante una determinada situación.

Ver todos los comentarios en https://www.motorpasion.com.mx

VER 0 Comentario

Portada de Motorpasión México