Las fusiones entre grupos automotrices son una tendencia que no se detendrá pronto

Ultimamente hemos visto como diversos grupos automotrices combinan esfuerzos para subsistir o en dado caso para aventajar a sus rivales. Hace unos días se hizo oficial la fusión entre FCA y PSA, mientras que antes, Volkswagen y Ford confirmaban una colaboración para fabricar coches eléctricos y más. Acorde a GlobalData, estos fenómenos de fusión y colaboraciones no se detendrán y por el contrario, serán más frecuentes.

Las razones son variadas, pero es claro que esto se da por la rapidez con la que la industria está cambiando debido a los avances y a la carrera que se forma para llegar a una electrificación total en un grupo automotriz.

Para llegar en primer lugar y tener un mejor aprovechamiento del mercado se necesita mucho tiempo de planeación y una cantidad exorbitante de dinero para poder financiar un avance o cambio tan grande. Varias compañías automotrices tienen los recursos y personal para lograrlo, sin embargo, si se alían con otro pueden acelerar el proceso, ahorrar dinero y posiblemente marcar el paso para el resto de la industria.

El apartado de recursos es de suma importancia, pues desarrollar plataformas y componentes nuevos no es un trabajo fácil y barato, estos desarrollos pueden costar cientos o miles de millones para que los consumidores puedan hacerse de un producto a un precio competitivo.

GlobalData preve que en 2020 y en los años por venir veremos muchas otras alianzas y fusiones. Justo esta semana Volvo e Isuzu firmaron una colaboración en el apartado de camiones. Así que ahora sólo nos queda esperar a ver que otras sucesos como este se dan.

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