No hay día en el que no sepamos de una marca que habla de su intención de tener coches eléctricos. Hoy ese turno es para MINI, pues ya barajan la posibilidad de convertir a los futuros modelos John Cooper Works —los más potentes y aptos para divertirnos en circuito—, en coches eléctricos exclusivamente.
Esto viene de una entrevista realizada por los colegas de Motor Authority a Mike Peyton, Vicepresidente de MINI Estados Unidos, quien asegura que los futuros MINI deben ser pequeños, ligeros, rápidos, pero no necesariamente impulsados por gasolina.
Aunque después de todo, estos cambios podrían tardar un buen rato. Ya que también comentó que a pesar de que MINI siempre está en búsqueda de las mejores soluciones y tecnología para sus clientes y coches, las baterías actuales siguen siendo muy pesadas para encajar en la filosofía de ligereza y gran agilidad de los MINI.
Por lo tanto deberemos esperar un poco más hasta que los avances logren darnos baterías ligeras que no comprometan las sensaciones que los MINI acostumbran a entregar cuando se les exige. Mientras tanto, la marca comienza a dar sus primeros pasos a ese rumbo con el MINI SE, que si bien tiene poder similar a un Cooper S, definitivamente dista de ser un JCW.