Para nadie es un secreto que los fabricantes de automóviles chinos han mostrado interés en tener una mayor participación en el mercado europeo, y ahora, uno de ellos podría estar a punto de afianzarse en el pleno corazón del panorama automotriz alemán.
Decimos esto porque en enero pasado, surgieron informes de que varios fabricantes de automóviles chinos estaban interesados en comprar o arrendar dos plantas de Volkswagen, una en Dresde y la otra en Osnabrück, las cuales cerrarán como parte de los continuos esfuerzos de reducción de costos de Volkswagen.
Ahora, todo apunta a que Chery, conocida en México como Chirey, el cuarto mayor fabricante de automóviles de China, que vendió 2,603,916 vehículos en 2024, a través de sus nueve marcas y empresas conjuntas, incluida Jaguar Land Rover, está cerca de finalizar un acuerdo para hacerse cargo de las dos plantas, mientras se prepara para expandirse a los mercados europeos.
La compañía confirmó que está en conversaciones avanzadas para comenzar a fabricar automóviles en Alemania, pero no reveló si está negociando con Volkswagen. El vicepresidente de Chery International, Charlie Zhang, declaró a Automotive News Europe que la decisión final se tomará una vez resueltos todos los posibles problemas.
"Necesitamos estudiar el plan de viabilidad, porque en Alemania la situación es muy compleja", declaró Zhang, y añadió que la compañía desea información detallada sobre los requisitos regulatorios, sindicatos, cadenas de suministro y costos.
Si se llega a un acuerdo para la compra de las dos plantas alemanas, la empresa pretende fabricar modelos para su nueva marca Lepas, lanzada hace apenas unas semanas, el 2 de abril, y vender versiones modificadas de la gama Tiggo de Chery, que estarán disponibles en los mercados globales. Los modelos fabricados en Europa incluirán dos SUV compactos y uno mediano, con motores de combustión interna, híbridos enchufables o 100% eléctricos.
En cualquier caso, Chery no es ajena a la construcción de automóviles en Europa en un esfuerzo por evitar los elevados impuestos colocados a los vehículos eléctricos chinos por la Unión Europea, ya que, desde 2024, ha estado ensamblando automóviles en una antigua fábrica de Nissan en Barcelona, España, en asociación con la firma local Ebro.
Zhang reveló que Chery se está preparando para modernizar esas instalaciones, con el fin de aumentar la producción del SUV Tiggo PHEV y agregar versiones EV de las marcas Omoda y Jaecoo, que se venderán en el Viejo Continente.
Al distribuir su producción en múltiples plantas europeas, Chery parece estar posicionándose no sólo para evitar barreras comerciales, sino también para adaptar sus ofertas de una forma más directa a las demandas del mercado local.
Imágenes: Chery International