SEAT Exeo, la vez que SEAT jugó al tú por tú contra los sedanes mediados con un Audi caducado

Cuando una marca pequeña pertenece a un grupo automotriz, tiene la fortuna de poder tomar prestados ciertos componentes de otras marcas más grandes para sus vehículos. Algo así ha pasado con SEAT desde que se unió a Grupo Volkswagen. La marca española se ha enfocado en vender autos que apuntan más a un público joven con ganas de coches de aspecto deportivo y con una buena relación entre el equipamiento y precio.

Mientras que Volkswagen se ha centrado en mantenerse como una marca más apegada al refinamiento y buen nivel de equipo, al menos en sus productos globales, los que están pensados para mercados emergentes son otro cuento. De esa asociación, en su momento SEAT tuvo un sedán mediano que buscaba competir con el Honda Accord, Mazda 6, Toyota Camry y compañía, era el SEAT Exeo.

¡Qué bueno es ser parte de la familia!

El SEAT Exeo era un sedán mediano de 4.6 metros de largo que buscaba ser el referente de la alineación de SEAT, el modelo más equipado, caro y amplio. Se mostró en público por primera vez en 2008, sin embargo, pasó casi un año para que llegara a las agencias de Europa y otros mercados más allá del viejo continente.

Estuvo disponible con carrocería Sedán y ST —vagoneta—. A pesar de que por fuera su diseño llevara la imagen de SEAT, había algo que te gritaba que esas figuras ya las habías visto antes en otro coche. Y es que la realidad es que el SEAT Exeo era un Audi A4 B7, una generación que estuvo disponible entre 2005 y 2008, pero que vivió un segundo aire a través de la marca española en diversas partes del mundo.

Sí, el Audi A4 B7 se retiró en 2008, pero vivió su segundo aire a partir de 2009 y hasta 2014 junto a SEAT. Para muchos esto podrá ser algo inaceptable, pero es un suceso que casi todas las marcas han aplicado en algún momento. Por ejemplo, la segunda generación del Jetta se mantuvo en activo por más de 25 años en China, o más cercano a nosotros, la permanencia del Tsuru por más de 15 años entre nosotros, a pesar de que sus nuevas generaciones se vendían al mismo tiempo, pero con otro nombre.

Durante su existencia el SEAT Exeo sólo tuvo una generación y un facelift de media vida, que le dio un look más fresco, sin embargo a pesar de empezar bien sus ventas, para los años que siguieron a 2010, batalló para conseguir colocar los autos con los clientes.

Hay quienes atribuyen ese descarrilamiento a la llegada y al comienzo de la fiebre de los SUV, pero también a los problemas económicos y aumento de precios generalizado que muchas economías del mundo sufrieron tras la crisis económica que se desató en Estados Unidos entre 2007 y 2008 y que afecto a muchas otras de forma colateral.

Si bien el Audi A4 es un coche premium, cuando se transformó en el Exeo, no apuntó a competir contra autos del mismo segmento premium, sí lo hizo contra sedanes medianos, pero de marcas generalistas, pues los avances aplicados a la siguiente generación del A4 no podían ser adoptados tan fácilmente por un modelo más antiguo.

Bajo el cofre, tuvo muchos motores a su disposición desde un aspirado que apenas llegaba a los 100 hp, hasta unos con 200 hp , con algunos en el centro que rondaban entre los 150 y 180 hp. Para Europa principalmente se ofrecieron algunos motores diesel. La transmisión podía ser una manual de seis cambios o automática también de seis marchas.

La ventaja contra los rivales de su segmento se encontraba en los motores turbo, que ofrecían una buena aceleración y si se conducía sin hundir constantemente el acelerador, podían obtenerse consumos buenos.

La despedida y un nuevo enfoque

Tras ir perdiendo ventas poco a poco, y aún al tener un cambio de imagen para mantenerse vigente, SEAT decidió sacar totalmente de su alineación al Exeo, en nuestro país lo hizo un 2 de enero de 2014, tuvo una salida relativamente silenciosa. Tiempo antes de eliminarlo de la alineación, SEAT ya tenía la mira puesta en lo que sería su prioridad a futuro, más allá de modelos exitosos como el Ibiza y León, pues desde entonces ya trabajaban en el Ateca, que conoceríamos todos durante 2016, una estrategia que le ha funcionado y que actualmente sigue muy fuerte, pues han complementado de la mano del Arona y Tarraco.

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