Probamos el KIA Soul SX, la combinación ganadora de un turbo y una transmisión remarcable

Pareciera que el KIA Soul nos sigue a dónde vayamos en cada una de sus presentaciones. Cuando llegó por primera vez a nuestro país, lo conocimos en una prueba de contacto con motor de 2.0 litros. Más adelante coincidimos con la versión de acceso que lleva el mismo motor que porta el nuevo Rio. Después viajamos a Puerto Vallarta para tener una primera aproximación con la versión Turbo, y finalmente, pudimos probar a fondo esta versión de 202 hp en un entorno urbano.

Si leíste la prueba que hicimos en Puerto Vallarta, seguramente tendrás una buena idea de cómo se mueve en carretera, sin embargo, lo que nos mueve en esta prueba, es cómo se comporta en ciudad, qué tanto consume y qué tan ágil es su transmisión de doble clutch, pues es bien sabido que este tipo de cajas a veces batallan en el tráfico de la ciudad. ¿Quieres terminar de conocer a este peculiar mini SUV?

Un repaso breve al Soul SX Turbo

El KIA Soul SX Turbo es el tope de gama del producto, sus características principales se encuentran bajo el cofre, con un motor de 1.6 litros turbo de cuatro cilindros que desarrolla 202 hp y 195 lb-pie de torque, disponibles poco más arriba de las 2,000 rpm y hasta las 4,500. Se acopla a una caja automática de doble embrague de siete relaciones que envía el poder al eje delantero.

Visualmente, llegó con una pequeña actualización que apenas puede diferenciarse de la versión anterior de la misma generación. Destaca la elección de colores en su carrocería donde resaltan dos colores base, y por ser la versión turbo, se le añaden detalles en rojo en la fascia delantera y debajo de las puertas. También podrás notar faros de xenon con luces de conducción diurna en LED, además de la placa que porta en la cajuela en color rojo, rines de 18" y puntas de escape cromadas.

A la vista, el Soul SX Turbo es más que llamativo, aun teniendo en cuenta su diseño que divide opiniones con más frecuencia de lo normal. La combinación de colores, los rines de mayor tamaño e iluminación, le dan un toque deportivo, que si eres de los que encuentran agradable su diseño, disfrutarás mucho. Esta parte es meramente subjetiva, pero debo admitir que la apuesta por un diseño juvenil y con un toque deportivo hizo que el Soul pasara de ser un mini SUV más, a un vehículo que se encuentra entre mis favoritos a nivel visual dentro del segmento. Pero eso es cosa mía.

Detalles interiores que te recuerdan que hay algo más de lo normal bajo el cofre

Buena selección de materiales, cómodo y con detalles que resaltan el toque deportivo. Sin embargo, hay algunos detalles que le hubieran caído bien como el techo panorámico, navegación o Apple CarPlay.

En el interior nos recibe un volante multifunción que además es calefactable y con el fondo achatado para mayor sensación de deportividad. Se unen asientos con mejor soporte lateral —mitad piel y mitad gamuza— cuadro de instrumentos con pantalla de 4", aire acondicionado automático de una zona, sistema de infotenimineto con pantalla táctil de 8", radio AM/FM, Bluetooth, entrada auxiliar y USB y compatibilidad sólo con Android Auto.

Aquí las sensaciones que te llevarás son bastante agradables, en la parte delantera casi no encontrarás plásticos duros y brillantes, se percibe una buena elección de materiales y disposición de los controles. La visibilidad es buena y se agradecen los espejos grandes con detección de punto ciego. ¿Cómodo? Sí, bastante. ¿Práctico? Sí, en cuanto a huecos para guardar objetos; la cajuela, no tanto por su tamaño reducido.

En la parte trasera hay un poco más de plásticos duros en las puertas y no contamos con salidas de aire acondicionado, un detalle que nos extrañó no encontrar. A nivel espacio, es bastante bueno, hay suficiente para que alguien de hasta 1.80 m viaje cómodo. De igual forma podrás acomodar hasta tres personas en la parte trasera, pues apenas se nota el túnel de escape en el piso.

¿Y en ciudad cómo se mueve?

Cuando hablamos de transmisiones, las de doble clutch generalmente ganan muchos halagos gracias a la rapidez con la que reaccionan y porque elevan la calidad de manejo cuando salimos a carretera o estamos en el circuito. Sin embargo, en un vehículo que apunta a pasar la mayor parte del tiempo en la ciudad, con tránsito pesado constante, la historia es distinta.

Este tipo de cajas tienen fama de torpes en ciudad o al circular a baja velocidad, especialmente cuando la hora pico se manifiesta o un tope se atraviesa. Soul, aunque padece este mal, no lo hace tan bruscamente como otros modelos. De hecho, dentro de todos los autos con caja de doble embrague que hemos probado, la del Soul es la más adecuada a las condiciones de nuestros caminos.

Generalmente, cuando viajas a velocidades bajas, la transmisión dudará bastante entre engranar primera o segunda marcha, provocando que al querer acelerar un poco sientas una respuesta torpe. Este fenómeno desaparece una vez que la segunda marcha alcanza su régimen de revoluciones óptimo o pasamos de tercera hacia arriba. Este efecto se marca más cuando seleccionamos el modo de manejo ECO, que como sabemos, adormece la respuesta del acelerador y hace que la transmisión haga los cambios a menores revoluciones.

A grandes rasgos el motor hace buen trabajo tanto en ciudad como en carretera, la aceleración es más que buena y para ser un vehículo que apuesta por un poco más a la comodidad, es divertido y ágil. Su suspensión filtra bien las irregularidades del pavimento, aunque eso sí, le hubiera ido mejor una configuración de mayor dureza para evitar el balanceo de la carrocería y enfatizar el manejo deportivo, aunque implicara sacrificar comodidad. Cosas más, cosas menos.

Un turbo poco sediento si lo sabes conducir

Seguramente desde que empezó el año, el consumo de tu auto o del que estabas pensando comprar ha escalado varios lugares en tu lugar de prioridades, créeme, lo ha hecho en todos.

En el caso del KIA Soul SX Turbo, en ciudad nos entregó un promedio de 12.5 km/l, mientras que en carretera logramos elevarlo a 13.4 km/l, un consumo más que bueno para el segmento, todo gracias al motor turbo que se incorporó a esta versión.

¿Es para mí el KIA Soul SX Turbo?

El Soul SX Turbo deberá estar en tu garaje si buscas un mini SUV que no sólo te brinde comodidad y seguridad, sino que también sea capaz de divertirte cuando lo llevas a carretera y que se sienta ágil al navegar por la ciudad. Si en tu mente esta algo que rompe un poco el esquema de diseño con un look de camioneta miniatura y que sea llamativo. De igual forma, será el objeto a elegir si no te molesta sacrificar bastante espacio en la cajuela y si puedes prescindir de algunos detalles que por el precio nos sorprendió que no se incluyeran, como salidas de aire acondicionado en la parte trasera, quemacosos o techo panorámico, paletas de cambio tras el volante, navegación o Apple CarPlay. Podríamos decir que es ideal para cuatro personas, aunque la capacidad de carga en la cajuela te dificultará llevar equipaje en viajes largos.

Si buscas algo juvenil, pero sin el precio extra añadido por el motor turbo, puedes checar el Soul EX con el que hay cerca de $60,000 de diferencia, o bien un Nissan Kicks. Otra opción turbo, pero más rudimentaria respecto a materiales sería el Suzuki Vitara Turbo. Si lo tuyo es llevar a más personas y tener buen espacio de carga, el Honda HR-V es la opción. Si buscas algo más refinado y aspiracional el Mazda CX-3 destaca. En caso de querer un mini SUV más civilizado y menos llamativo puedes voltear hacia el Hyundai Creta.

' Cifras oficiales del fabricante

En Motorpasión México | Entonces, ¿conviene o no? Probamos (de nuevo) el KIA Forte Sedan